4 nov 2008

Moleskine IV

Chica de tapa

No es tan fácil hacer el ridículo. En principio se cuenta con piedras, más que nada de las de ayer. Una vez estuvo así.

Pero era un metro, o verde, pero como era un pico de pato no pudo el albañil otra vela para arriar. Un carajo, de barco, pero incipiente labio melancólico. Un serrucho para las entrañas, como esa pastilla que cayó (marrón) entre las heces.

Era alergia, sí.